Dios no solo es un ser poderoso, también es un Dios de orden, y nada sucede por casualidad. Tu no naciste por un descuido de tus padres o por una noche loca de ellos, así no hayas estado en los propósitos de tus padres, puedes sentirte muy feliz porque en los planes de Dios si lo estabas.
Todo lo que le sucedió a Jesús ya estaba en los planes de su padre. V 49 “Cada día estaba con vosotros enseñando en el templo, y no me prendisteis; pero es así, para que se cumplan las Escrituras.”
No solo las cosas buenas sirven para nuestra formación. Muchas veces las derrotas nos dejan más enseñanzas que las mismas victorias.
La necesidad muchas veces nos lleva a la superación. Muchos de los inventos que hoy disfrutamos fueron posibles gracias a que alguien respondió a una necesidad. Había necesidad de los medios de transporte, y de todas las demás maravillas que disfrutamos en este siglo.
Dios dice que por nada debemos estar ansiosos, todo lo debemos dejar en sus manos, la ansiedad nos lleva a la desesperación, y la desesperación nos hace cometer errores. Filipenses 4: 6- 7 “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. 4:7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
El obedecer la ley de Dios nos da paz. Salmo 119: 165 “Mucha paz tienen los que aman tu ley,
Y no hay para ellos tropiezo.” Tener paz no significa ausencia de problemas, Dios no va a prepararnos un mundo especial solo para nosotros, el lo que quiere es prepararnos a nosotros para conquistar ese mundo difícil y lleno de problemas.
Y no hay para ellos tropiezo.” Tener paz no significa ausencia de problemas, Dios no va a prepararnos un mundo especial solo para nosotros, el lo que quiere es prepararnos a nosotros para conquistar ese mundo difícil y lleno de problemas.
Debemos estar seguros que Jehová es nuestra fortaleza, es decir el nos da fuerzas para continuar en la batalla. Isaías 12: 2 “He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es JAH Jehová, quien ha sido salvación para mí”
Daniel es un verdadero ejemplo de confianza en Dios. Daniel sabia que Dios lo podía salvar Daniel 3: 17-18 “He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará.”
Daniel estaba dispuesto a servirle a Dios sálvelo o no lo salve. V 18 “Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado”
Hay momentos en nuestra vida en donde quisiéramos que las cosas fueran de una manera que realmente no son. Todos hemos querido que por arte de magia el episodio gris que estamos viviendo sea transformado por un episodio lleno de colores gloriosos que reflejen nuestra felicidad ante dichas situaciones.
Pero hay que ser realistas, las cosas muchas veces no salen como nosotros queremos y es porque Dios que conoce el pasado, como lo presente, así como también el futuro sabe mejor que nosotros lo que es mejor para sus hijos y por eso las cosas no salen como quisiéramos.
Los pensamientos o los planes de Dios para nosotros son los mejores, así nosotros no lo entendamos. Jeremías 29: 11 “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.”
NO TE PREOCUPES DIOS TIENE EL CONTROL A EL NADA SE LE SALE DE LAS MANOS
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En este mundo es natural que se tengan problemas de diferente índole, algunos por falta de dinero, a otros les sobra el dinero, pero están enfermos, otros están enfermos y no tienen dinero, en fin unos tienen más problemas que otros, pero nadie se escapa de los problemas. Jesucristo mismo les dijo a sus discípulos que mientras estén en este mundo tendrían aflicciones. Juan 16: 33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
En marcos encontramos lo que le paso a un seguidor de Jesús, un seguidor anónimo que por su forma de actuar no quedo sino en el recuerdo de marcos ya que los otros evangelistas no lo mencionan.
Que hace que una persona quede en el anonimato, que deje de ser importante. Conozcamos lo sucedido, porque en este caso no podemos decir conozcamos al personaje, porque ni el nombre se conoce. V 51-52 “Pero cierto joven le seguía, cubierto el cuerpo con una sábana; y le prendieron; 14:52 mas él, dejando la sábana, huyó desnudo.”
Hay muchas personas que siguen a Jesús, unos lo hacen abiertamente como en el caso de los discípulos de Jesús, ellos no eran discípulos encubiertos, lo que paso es que al final el miedo les gano y también huyeron. V 50 “Entonces todos los discípulos, dejándole, huyeron.”
Este joven quería hacer lo de la avestruz; esconder la cabeza para evitar que la vean.
El hombre tiene la tendencia a esconderse cuando está pasando por dificultades, esta costumbre viene desde Adán, el se escondió tras de un árbol, este joven tras de una sabana, y ¿tu detrás de que te escondes?
El esconderse genera:
1. Alejamiento. Este joven seguía a Jesús pero no estaba cerca, es muy difícil conocer a alguien cuando se está lejos. Si quieres conocer y amar a tu familia entonces acércate a ella. Si quieres conocer a Dios acércate a él.
2. Irresponsabilidad. El esconderse de los problemas es un acto de irresponsabilidad, el problema en lugar de terminarse, tiende hacerse más grande.
3. Verguenza. En la biblia el quedarse desnudo significa vergüenza. Tarde o temprano el que no enfrenta sus problemas queda en vergüenza.
Y sobre todo de Dios no nos podemos esconder. Salmos 139:7-12 “¿A dónde me iré de tu Espíritu?
¿Y a dónde huiré de tu presencia? 139:8 Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. 139:9 Si tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, 139:10 Aun allí me guiará tu mano, Y me asirá tu diestra. 139:11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;
Aun la noche resplandecerá alrededor de mí. 139:12 Aun las tinieblas no encubren de ti, Y la noche resplandece como el día; Lo mismo te son las tinieblas que la luz.”
¿Y a dónde huiré de tu presencia? 139:8 Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. 139:9 Si tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, 139:10 Aun allí me guiará tu mano, Y me asirá tu diestra. 139:11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;
Aun la noche resplandecerá alrededor de mí. 139:12 Aun las tinieblas no encubren de ti, Y la noche resplandece como el día; Lo mismo te son las tinieblas que la luz.”
Pero también podemos ver desde otro punto de vista el episodio de este joven.
La situación era difícil. Jesús estaba siendo preso. V 45- 46 “Y cuando vino, se acercó luego a él, y le dijo: Maestro, Maestro. Y le besó. 14:46 Entonces ellos le echaron mano, y le prendieron.”
Los discípulos huyeron del lugar. V 50 “Entonces todos los discípulos, dejándole, huyeron.” El miedo se apodero de ellos y no pudieron resistir lo que estaba pasando.
Pero alguien, marco la diferencia escondido en su sabana un joven lo seguía. V 51 “Pero cierto joven le seguía, cubierto el cuerpo con una sábana”
Pero sucedió lo inesperado lo descubrieron. V 51 b “y le prendieron;” y lo más lógico es que empezaron a forcejear. Por mucho que el luchaba no podía soltarse de sus agresores, hasta que se le ocurrió algo: soltó la sabana que le impedía defenderse y correr. V 52 “mas él, dejando la sábana, huyó desnudo.”
Logro escapar, no como no como Rambo o cualquier protagonista de película, que con sus artes marciales hace maravillas, lo hizo al estilo de José el de los sueños que cuando fue acosado por la mujer de Potifar, dejo la ropa y huyo del pecado como todo héroe cristiano. Génesis 39: 12 “Y ella lo asió por su ropa, diciendo: Duerme conmigo. Entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó y salió.”
Muchas veces para poder huir de las presiones del mundo es necesario dejar cosas, que nos impiden avanzar. Que necesitas dejar, cuál es tu sabana que no te permite alejarte del mundo. Tus antiguas amistades, la televisión, los juegos, las tradiciones de tu antigua religión. Etc.
Hay muchas interpretaciones para esta historia, lo importante es que esa sabana para ti no sea un escondite para el pecado, ni tampoco algo que te impide avanzar, más bien que esa sabana sea la protección de Cristo. Si te la quitas puedes quedar desnudo.